Tenemos suerte, parece que no va a llover. Está un poco nublado y con niebla, pero vamos a intentar ir a la montaña para hacer un camino por el bosque que nos lleve de vuelta a Kamikochi.
A ver si nos vamos a poner perdiditos de agua.
Puente Kappabashi-dori, cerca de nuestro hotel, esta mañana con niebla de fondo.
Cogemos un autobús hacia Hirayu Onsen y luego otro hacia Shinhodaka. Aquí, subimos en teleférico hasta Nishihodaka a 2.100 metros de altura.
El teleférico de dos pisos.
No hay ni un extranjero, sólo japoneses y nosotros. Van equipadísimos: con sus mochilones, botas de montaña y los bastones esos para ir de travesía.
Iniciamos la marcha que nos lleva por entre montañas y en medio de mucha vegetación hasta un refugio.
Adentrándonos en el bosque.
Siguiendo la ruta de vuelta hacia Kamikochi.
Llegamos a la primera parte del camino: el refugio Nishi Otaka.
Descansamos un poquito en el refugio, lo justo para tomarnos unas papas y una botella de agua y adelante. Empezamos a ver nubarrones y luego se vuelve a despejar, que siga así.
Esta parte del sendero es más bien campo a través, la vegetación es más espesa y hay menos gente que continúa, pero nosotros tenemos que llegar a Kamikochi.
Reiniciamos la marcha entre la espesura.
Ya estamos más cerca, seguimos por el puentecito de madera.
Alcanzamos el río y ya estamos en Kamikochi. Ha sido una excursión campestre muy entretenida. Como era por el bosque y aquí hace menos calor, los pies y nosotros aguantamos mejor el tirón.
Vista de Kamicochi.
Vista de Kamikochi y nosotros.
Vamos a cenar los diversos platitos de pescado y variedades que nos esperan, y luego a ver si tomamos un baño caliente (más bien ardiente) en el onsen del hotel con vistas a la montaña.
Saludos y besos. Receurdos a todos.
No os preocupéis que estamos muy bien por aquí y con pocas ganas de volver, jeje.
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