Tres y media de la madrugada y «parriba». A las cuatro viene los jeeps a por los turistas.
Subimos 6 por coche y nos acercan a un mirador para ver amanecer con el volcán de fondo. Hace un frío por estas alturas que es «demasiao», nos ponemos los chubasqueros y la toalla por encima para no quedarnos más pajarito de lo que ya estamos.
Está todo oscuro, pero se ven unas montañitas y el volcán echando humillo. Poco a poco va amaneciendo…
Después de verlo, se nos olvida la habitación de ayer, las horas de sueño y de autobús. Merece la pena, la vista es increíble.
Volvemos a los jeeps a punto de congelación y los conductores están preparando cafeses. Les compramos uno para coger calorcico.
Ahora nos llevan a la base del volcán. Desde aquí hay que ir andando hasta unas escaleras que suben la montaña hasta el cráter. En la esplanada hay muchos lugareños con mini caballitos para ahorrarte la caminata. También puede verse un templo hindú.
Nosotros vamos, como la mayoría, andandito. El paseo no es muy largo y se llega enseguida.
Aquí se forma un poco de atasco. La gente va a dos por hora subiendo la escalera y se quedan arriba del todo bloqueando la subida, nada más subir, en lugar de ir bordeándo el cráter. Hay que decir que justo al acabar las escaleras hay una especie de barandilla a ambos lados pero no muy larga y por eso la mayoría de la gente se queda por aquí apalancada, pero es mucho más bonito rodearlo y verlo directamente.
Vuelven a dejarnos en el superdeluxe hotel para desayunar. Aquí eperamos un minibús que, a las 10 de la mañana, nos lleva de vuelta a Probolingo para coger otro hacia el volcán Ijen.
En Probolingo, igual que ayer, estamos una horita hasta que llega el minibús con aire «condicionado» a lo que bajes la ventanilla. El caminito es de unas 6 horitas y casi no hace calor, llevamos una sudada efecto sauna ideal.
Las carreteras en general, por lo menos por las que estamos yendo, están bastante bien, eso sí con un solo carril para cada sentido. En este recorrido la mitad del camino es bueno, pero el resto es un no parar de socavones y baches. De todas formas el paisaje es una pasada: campos de arroz, de maíz, plantaciones de café, tabaco, caña de azúcar y muchísima vegetación.
Finalmente llegamos a la zona del Ijen. Nos dejan en el hotel Arabika. Son unas casitas que están en una plantación de café. Es una lástima no poder verlo de día porque los jardines y todo el recinto parece muy bonito, lo malo es que está todo oscuro y mañana nos marchamos antes de que amanezca.
Después de la experiencia en la suite de anoche, la habitación de hoy nos parece todo un lujo, tenemos agua caliente y todo!
Cenamos, duchita calentita hasta dejar sin gas al hotel y a dormir que mañana hay que madrugar, otra vez levantadita a las 3:30, para que nos lleven a ver nuestro segundo volcán.
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2 respuestas a 8 de agosto – Monte Bromo y Camino a Ijen