13 de agosto – Valle del Kiso (senderismo Magome-Tsumago)

Casi nos dormimos y perdemos el tren. Un sin vivir!!!

Dejamos Tokio y vamos rápidamente a por un tren que nos lleva a Matsumoto. Al llegar, a las 9:10h, a buscar el Ryokan para dejar las mochilacas y volver a la estación a por otro tren (9:50h) hacia Nakatsugawa (11:06). Ahora un autobús (11:15h) que nos deja, al fin, en Magome a las 11:45h.

Magome y Tsumago son dos pueblecitos típicos japoneses antiguos, situados en el Valle del Kiso.

Empezamos la caminata en Magome. Es un pueblecito con una calle principal empedrada llena de tiendas de souvenirs. Casi nos asamos subiendo la callecita, yo me tuve que tomar un polo de melocotón. Muy «potito» y turístico, así que vamos a empezar el camino a Tsumago.


Calle principal de Magome.


Calle principal de Magome.


Iniciamos el sendero hacia Tsumago.


Caminando por el senderito no vemos a casi ningún japonés, unos italianos y una pareja de españoles «despistaos» como nosotros.
Nos están picando bichos por las piernas y los brazos algo exagerado, es un no parar de rascarse. Pero aún así el recorrido merece la pena: vemos mucho verde, cascaditas y aldeas típicas.


Caminando por el sendero.


Una cascada que había por el sendero.


Descanso para retomar fuerzas.


Por fin llegamos a Tsumago con los talones y las plantas de los pies carcomidos. Aquí las casas son más antiguas, también hay bastantes tiendecitas pero el entorno es más auténtico. Es un pueblecito protegido para la conservación de edificios tradicionales, por lo que se han suprimido la mayoría de elementos modernos como tendidos eléctricos. Probamos unos pinchitos típicos unos de bolas de arroz con salsa de soja y nuez (gohei-mochi), y otros de ternera; con éstos casi se me cae la baba.

Nos quedamos empanados paseando por las calles y cogemos el último autobús hacia Nagiso.


Casa de Tsumago.


Casa de Tsumago.


Pinchito de ternera en Tsumago (riquísimo).


Calle de Tsumago.


Un gato japonés en Tsumago.


De Nagiso nos toca otro tren para volver hacia Matsumoto, cenar y dormir.

Cenamos en un mejicano en el que encontramos a cuatro tunos (vestidos con su trajecillo, sus guitaritas y todo). Se han puesto a cantar para sacar algo de dinero de los que cenaban por allí y así ir teniendo algo más para el viaje. Han hablado un rato con nosotros y también están encantados con Japón. Dos japonesas que cenaban a nuestro lado, dudando un poco, al final por insistencia les dieron un billetito y nosotros cuatro monedicas, que también tenemos gastos de viajero. ¿Qué te parece los tuneitors en Japón na menos, facturarían las guitarras?

Llegamos al Ryokan «Marumo», es muy tradicional (de 1868) y nos gusta mucho. Los dueños son muy atentos, un no parar de «arigato» (gracias) y reverencias que se van a deslomar la espalda un día de estos.

Pues ale, baño calentito que nos vamos a dar y a dormir en el suelo en nuestros futones sobre supertatamis.


Ryokan de Matsumoto.


Baño calentito de Matsumoto (hay que levantar las tablas y meterse en el agua,jeje).



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3 respuestas a 13 de agosto – Valle del Kiso (senderismo Magome-Tsumago)

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